¿Cómo no quererte si desde pequeño vengo a verte?

Foto: Felipe Rincón - Santa Fe Para Siempre

Llevaba ya varios días pensando en que, iniciaría esta entrada con un “Mi Santa Fe era”, pero la realidad es que jamás será pasado; nunca tendrá un acento de mala nostalgia, y mucho menos de olvido. Por lo tanto puedo decir que:

Mi Santa Fe es un equipo que me ha tocado de todas las maneras; tiene una constancia que me empuja, que me lleva hacia adelante si camino junto a él.

Pero, sobre todo, es símbolo del buen fútbol, del fútbol moldeado en una escuela, no del fútbol comprado con dinero, como Millonarios; el fútbol de solo toque y talento; el fútbol en que la altura ni la corpulencia importan, porque se juega la mitad con la cabeza y la mitad con los pies, el fútbol que hipnotiza, el fútbol que ha logrado reunir la belleza y la eficacia.

Existen muchas razones por las cuales Santa Fe es mejor, sí, pero no lo voy a hacer. Prefiero recrearme mirando este equipo que cambió el modo de jugar al fútbol y es base de la vida que conquistó mi ‘corazón cardenal’.

Tengo muchos amigos que mueren por Millonarios: los estimo y procuro no molestarlos con comparaciones. Amigos que un día pudieron escoger libremente, y escogieron mal.

Si de pasión se trata, y en fútbol se piensa, no quedan dudas que estamos hablando de la hinchada de Independiente Santa Fe; famosa por haber alentado al equipo durante 37 años sin títulos en los campeonatos locales.

En el estadio, todo el campo es un mundo, es un solo canto.

Somos de esa gente amable, sonriente y de corazón ardiente.

Juntos hemos sentido al cantar lo que es ganar, la hermandad.Aunque nunca ha sido fácil superar la adversidad y a veces hemos llegado a llorar.

Nadie nos doblegará, seremos indomables, seremos invencibles, seremos leones.

Muchas gracias, señor Wilson Gutiérrez, y leones, Vargas, Roa, Anchico, Omar, Rodas, Cabrera, Cardona, Otálvaro, Quiñones, Meza, Leyton, Gómez, Borja, Asprilla, Torres, Centurión y Bedoya, por mostrarnos un equipo digno, un equipo que representa de la mejor manera lo que significa Santa Fe: pasión y amor. Blanco y rojo.